Betzl ha sacado recientemente al mercado una tabla de
planchar específica para deporte extremo. La hemos probado y hemos sacado
nuestras conclusiones en este artículo. ¿Quieres verlo?
La nueva Light-Ironing es una tabla diseñada específicamente para plancha extrema. Su característica más destacable es su ligereza. Para conseguirlo, los chicos de Betzl han usado la tecnología más moderna empleando materiales de última generación. De esa forma, la robustez se mantiene al nivel de otras tablas más pesadas, si bien el tipo de plegado es el ya clásico de otros modelos, aunque con modificaciones, de modo que el transporte sigue siendo algo incómodo.
En España parece que estará disponible el próximo otoño a través del distribuidor exclusivo para la península parrapes.com,
a un precio aún por determinar. Todo indica que no será barata, pero
sus prestaciones bien merecen un cierto desembolso para poder disfrutar
de su excelente rendimiento.
La nueva Light-Ironing es una tabla diseñada específicamente para plancha extrema. Su característica más destacable es su ligereza. Para conseguirlo, los chicos de Betzl han usado la tecnología más moderna empleando materiales de última generación. De esa forma, la robustez se mantiene al nivel de otras tablas más pesadas, si bien el tipo de plegado es el ya clásico de otros modelos, aunque con modificaciones, de modo que el transporte sigue siendo algo incómodo.
La primera impresión es que se nos va a desarmar en las
manos; pero nada más lejos de la realidad. Su extrema ligereza nos puede llevar
a engaño pero una vez montada nos transmite una sensación de resistencia al
nivel de las mejores.
Se desmonta en dos
partes: el pie por un lado y la tabla propiamente dicha por otro. Así, podemos
llevarla como un todo (uniendo ambas partes en posición de plegado) o
repartirla en dos mochilas para compartir el peso. Sigue siendo, no obstante,
voluminosa al suponer una tabla de 1,07m que puede dificultar el transporte.
El montaje consiste en un ingenioso sistema de velcro que
resulta seguro y requiere muy poco tiempo, pero que hace necesario voltear todo el conjunto, lo que en situaciones de poca movilidad puede resultar algo engorroso.
El cobertor de planchado, de membrana simple y con elásticos ajustables,
correcto.
El aspecto estético, también muy importante en este tipo de
material, es bueno. Una apariencia de tabla de planchar muy al uso hará que
nuestras fotos tengan ese plus escénico; verdadero aspecto de plancha extrema clásica, tan demandado por
los deportistas.
Se echa de menos, eso sí, una funda o similar que ayude en
el transporte y proteja el conjunto de posibles golpes.
La hemos probado en escalada y con una prenda verdaderamente
comprometida, una camisa de franela, que como saben nuestros lectores supone un
planchado de máxima dificultad. Y se ha comportado de una forma excelente. La
rigidez que transmite al planchador extremo, la solidez y la seguridad general
han estado al nivel de las mejores. Intuimos, no obstante, que su verdadero
potencial se pondrá más de manifiesto en actividades de esquí o alpinismo donde
la posición del planchador será más acorde con sus características.
Os dejamos unas fotos de las pruebas en las que podéis ver
su estética y comportamiento en escalada.
Dani posiciona la tabla. Un proceso algo engorroso a partir de un 5b/5c |
Una vez bien posicionada, permite un planchado cómodo y verdaderamente extremo |
Y he aquí el resultado |